EL RATÓN PÉREZ
Ésta es la historia del rey Buby I, gran amigo de los niños y defensor de los ratones. A la edad de seis años, al rey Buby se le empezó a mover un diente, con lo que todos los médicos se reunieron para ayudarle a mudar esa pieza de leche. Cuando se lo sacaron, y como ha sido costumbre entre los niños desde siempre, Buby escribió al ratón Pérez y dejó su diente bajo la almohada para que el ratón se lo llavara y le dejara a cambio un regalo.
Cuando el ratón Pérez llegó aquella noche, Buby lo esperaba despierto y enseguida se hicieron muy amigos, contándose muchas cosas de su vida y sus familias. Pero el tiempo pasaba y el ratón Pérez aún tenía que ir a recoger el diente de otro niño muy pobre. Como Buby quería acompañarle, el ratón Pérez le convirtió en un ratoncito parecido a él.
El camino estuvo lleno de peligros para ambos, que tuvieron que esconderse de las personas y los gatos, pero cuando por fin llegaron a la casa del niño pobre, Buby no podía creer lo que veía. Él, que siempre había vivido entre el lujo de su palacio, no sabía que existían niños pobres, harapientos y hambrientos como aquél, por lo que se le llenaron los ojos de lágrimas.
El ratón Pérez dejó bajo su almohada una moneda y después llevó a Buby de regreso a su palacio, volviendo a convertirlo en niño.
Pero Buby nunca olvidó aquella aventura y reinó con justicia, ayudando a todos los necesitados, niños y grandes, que hasta entonces sólo habían recibido el regalo de las monedas que el ratón Pérez les dejaba a cambio de sus primeros dientes.
Padre Luis Coloma.
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