INFERTILIDAD Y EMBARAZO. MI EXPERIENCIA
Pues sí, puedes tener problemas para quedarte embarazada, no lograrlo por más de un año o dos, y aún así conseguir el embarazo e incluso puede llegar de forma natural.
Si has llegado a esta publicación por que te encuentras en el camino de la infertilidad, al igual que yo, te mando un fuerte abrazo y mucho ánimo.
Puede que hayas leído mis anteriores publicaciones sobre la infertilidad, la búsqueda de clínicas, o mi experiencia con la punción, entre otras que versan sobre este mismo tema. Si es así, sabrás que mi primer intento de FIV acabó cancelándose. La doctora que me realizó la punción, me recomendó que no perdiese tiempo ni dinero en más intentos. Que no conseguiría quedarme embarazada. Que solo lo lograría mediante la ovodonación.
La ovodonación, en teoría, es más efectiva porque se supone que los óvulos son de buena calidad, pues la donante suele ser joven, entre los 25 y los 30 años, y en teoría, dichos óvulos pasan por una serie de estudios genéticos (PGT), para evitar que el embrión tenga malformaciones o enfermedades genéticos, entre otros.
Sin embargo, no todas las clínicas hacen estudios exhaustivos, ni siempre ocurre un embarazo o llega a término, es decir, que puede producirse el aborto. Hay clínicas que venden packs de garantía, generalmente llamados "pack bebé vivo en casa" o similar, en el que pagas un pastizal y te garantizan un cierto número de intentos y de óvulos de diferentes donantes. En el caso de no producirse el embarazo, o si ocurre pero se produce el aborto, te devuelven el dinero. Otras clínicas no ofrecen estos packs, directamente te ofrecen la ovodonación como método mágico, maravilloso e infalible, pero si no funciona, te quedas sin dinero, sin tiempo, sin bebé y con un bajón psicológico impresionante.
Y ¡OJO! Esto no te lo cuentan en la clínica. Como mucho te lo explican en un documento con una letra minúscula justo cuando inicias o ya estás en mitad del tratado.
En mi caso, la opción de ovodonación, ni me lo planteé. Ya sé que mi reserva estaba por los suelos y me habían dicho que había sido todo un fracaso rotundo. Pero en redes sociales leía casos de mujeres que, a pesar de una mala FIV, han seguido y lo han conseguido. Cuál era mi problema si según la clínica, todo estaba bien. Dónde estaban los informes por parte de la embriologa y de la doctora. Jamás me los han dado. Tan solo me dieron mis analíticas previas y que ya me las habían realizado el mes antes en la Seguridad Social. ¡Valiente porquería de clínica!
Tras la punción, me habían hiperestimulado de tal forma que estuve dos meses con los ovarios inflamados. Según ellos, me habían puesto el tratamiento más fuerte. Es por eso que, desde entonces me duele cada vez que me pongo con la menstruación, e incluso cuando ovulo, cosa que antes no me dolía en absoluto. Los pechos me dolían tanto que temía quitarme el sujetador, pues si me dolía teniéndolo puesto, más aún al quitármelo. Un horror.
Normalmente suelo tener fatiga, mareos, cansancio... debido al alto índice de colesterol y triglicéridos, tan alto que tengo medicación, pero la clínica no le dio importancia. También sufro de fuertes migrañas, igual de insignificante para la clínica. Curiosamente, durante el tratamiento hormonal para la FIV, no me dio ningún episodio de migraña y también había dejado el tratamiento para el colesterol y triglicéridos, ya que me advirtieron de que me pondrían medicación. Tras la punción, la embrióloga, cuando llamó para decir que se cancelaba la FIV, me preguntó varias veces, que si había tomado algún medicamento durante la estimulación.
¿Por qué detallo esto? Pues porque a pesar de la única opción que me daba la clínica, la ovodonación, y mi rotundidad a ello. Estaba devastada, dolorida, frustrada. Había fallecido mi suegro, los ahorros y la ilusión se habían ido por el retrete, y lo único que había conseguido era una inflamación y un dolor increíble, además de los síntomas mencionados.
Al mes siguiente, justo cuando me tocaba ovular, fui a una ginecóloga privada del pueblo. No era una clínica de fertilidad. Lo único que quería saber es cómo me encontraba por dentro, intentar poner solución al dolor que tenía. Efectos secundarios de la estimulación y punción. Con el tiempo desaparecerían.
Un mes más tarde, tras la visita a la ginecóloga del pueblo, es decir dos meses después de la punción, seguía con mis dolores, mareos, fatiga, incluso, un par de días antes de ponerme mala con la regla, noté que se me subía la tensión, me encontraba mal, con las manos y pies fríos, pero a la vez me ardían la cara y las orejas, estaba roja como un tomate. Era curioso, llevaba días de mucho estrés, siempre corriendo, pero en ese momento estaba tranquila, en casa, sentada. Me pareció raro, pero no le di importancia, se me pasó enseguida. Aún no me había dado ningún episodio de migraña. Tampoco lo eché de menos, sinceramente.
El mismo día que me tenía que venir mi amiga la de rojo 🩸, fui a una comida de navidad. Me harté de comer y de beber de todo. Todos los nervios, penas y estrés los tenía que eliminar, así que me lo pasé pipa en dicha comida. Me hacía falta la verdad. Llevaba compresa por si venía en algún momento, aunque ese día no llegó, mejor, que llegue el día que estás de fiesta es un fastidio.
Dos días después de dicha comida, me dio por hacerme un test de ovulación. No sé, quizás mi cuerpo, ahora loco, estuviese ovulando y sino, pues pronto vendría mi "amiga Eva". Mi sorpresa fue mayúscula cuando me salió super alto. Qué raro, bueno pues nada, está noche fiesta, pensé.
Pero luego recordé que yo siempre tengo un ciclo muy puntual, que no me había dado migraña y que además el dolor era como unos pequeños calambres, tanto en los ovarios como en el útero. Tenía un test de embarazo de los baratos, de los de la línea de evaporación ¿Qué podría perder?
Espera... ¡No puede ser! Siempre me dan negativo y ahora... Me había salido una segunda rayita muy leve. ¡Es hora de sacar la artillería pesada! ¡A por el test digital! Es caro pero se supone que es muy fiable.
¡No! ¿Es broma? ¡Ha dado positivo! A ver, a ver, a mí me habían dicho en la Seguridad Social que no podría, en la clínica privada que me olvidase, que yo no sirvo, que sólo si es con ovodonación... ¿Y ahora me he quedado de forma natural? ¡JA! ¡Y los tres test lo dicen muy claro! Menos mal que aunque tuviese poca reserva, no me di por vencida.
¿Qué hubiera pasado si tras dar a luz con una ovodonación, me hubiera quedado embarazada de forma natural? ¿Querría menos a mí bebé por no ser genéticamente mío y el otro más por sí serlo? ¿Me arrepentiría por no haber luchado más? Conociéndome como me conozco, sí, por supuesto que me habría arrepentido de no indagar más. He leído y escuchado casos de mujeres que tras dar a luz, se han arrepentido y los han dado en adopción, incluso han decidido interrumpir el embarazo. ¡Menos mal que no me lancé a lo loco y sin pensarlo! Primero hay que luchar antes de darse por vencida. Pues las clínicas privadas te meten presión y te pintan Ovo como si fuera de color de rosas, y la realidad es que no lo es. Hay mujeres que han recurrido a la ovo o a doble donación incluso, y a pesar de ello, después de 5, 10 o incluso 15 óvulos donados, no ha habido implantación o han acabado en abortos, por lo que no es tan mágico ni maravilloso. Se trata de ciencia, de estudios para conocer más acerca de la mujer gestante, la calidad de los óvulos, la receptividad de éstos, la calidad y cantidad del esperma... En definitiva, muchos factores que se pueden conocer mediante la realización de pruebas.
En mi caso, cuando le conté a mi marido que estaba embarazada, ni se lo creía. Fuimos a una farmacia, de guardia, pues necesitaba salir de dudas lo antes posible, a comprar otro test de embarazo, que también dio positivo, esta vez decía las semanas.
A los pocos días manché, muy poco, marrón oscuro. Tenía mucho miedo pero intenté no pensar en ello, ya que el manchado era muy leve. Al poco tiempo, me llamaron diciendo que mi madre se había caído en su casa, estaba sola y no podía levantarse. Acudí corriendo a levantarla. Así que tras el susto fui al hospital de urgencias. Me hicieron una eco transvaginal porque aún era demasiado pequeño, aún así pude verle. Eran 5 milímetros de felicidad, con un corazón latiendo para hacerme la mujer más feliz del mundo. ¡El mejor regalo de reyes anticipado que podía tener! Tenía molestias en el vientre, pero eran normales, el manchado que había tenido también había sido normal, todo estaba bien. No tuve migraña durante el embarazo, ni mareos y la sensación de fatiga constante pasó a ser sólo fatiga cuando llegaba la hora de comer y no había comido. Ni vómitos, ni hinchazón, nada de nada. Todo parecía ir maravilloso y perfecto.
Así que mi consejo es no precipitarse, por mucho que una mujer quiera ser madre o un hombre quiera ser padre. Primero hay que pensar bien los pros y los contras de la donación, no es algo que debamos tomar a la ligera. Informarse bien y no creerse lo que nos cuenten en las clínicas por muy privadas que sean. Hay que leer y escuchar las vivencias de otras personas que se encuentran en una situación lo más similar a la nuestra. Pues no todos tenemos el mismo problema, y un mismo problema puede resolverse de muy diversas formas. Hay quienes han optado por la ovodonación o doble donación, como ya he mencionado antes, y no han conseguido embarazo y/o han sufrido abortos. Así que, procura tú y tu pareja, si la tienes, realizar todas las pruebas que estén en vuestra mano antes de dar el paso (KIR HLA-C, cariotipo, test de trombofilias, biopsias, pruebas de intolerancia alimentaria, seminograma, fragmentación espermática, FISH...).
No te desanimes, no estás solo o sola. Somos muchas las personas que nos encontramos en el camino de la infertilidad. Si tienes alguna duda o si conoces a alguien que tenga problemas de infertilidad, no dudes en aconsejarle que pregunte en los grupos de redes sociales o por aquí. Puedes dejarme un comentario o escribirme al correo. Ayudaré encantada en lo que pueda. ¡Ánimo! 💚💚💚
Mé estoy dando cuenta al leer tu blog que eres una mujer con una fortaleza extraordinaria y un corazón que no te cabe en el pecho, porque volver a pasar por lo vivido contándolo para que sirva de ayuda a otras mujeres no tiene precio. Eres una mujer extraordinaria!!! Y si no has podido ser madre biológicamente, seguro que está vida te depara algo muy muy bueno !!! Ánimo y gracias por compartir tú experiencia!!! Un abrazo enorme,Sete!!!
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tu comentario. Por suerte hay muchas mujeres que considero que son unas "Superwoman" porque a pesar del largo y duro recorrido que llevan siguen al pie del cañón sin rendirse. Mucho ánimo a todas esas mujeres y hombres de la Infertilpandy
ResponderEliminar